21 Ene Visita al Pediatra
Siempre que un niño está enfermo es necesario que sea revisado por su pediatra, pero las visitas de control para el niño sano tienen una importancia primordial. La Academia Americana de Pediatría desarrolló una serie de recomendaciones para la atención del niño sano en las que se incluye un calendario de visitas al pediatra según la edad desde la infancia hasta la adolescencia.
En el primer año de vida se recomienda una primera visita entre los 3 y 5 días de vida, al mes, a los 2, 4, 6, 9 y 12 meses de edad como mínimo. Si fuera necesario incrementar la frecuencia de las revisiones, será acorde al criterio del pediatra a cargo.
Los beneficios que conlleva la revisión periódica del pediatra son múltiples, entre ellos se pueden mencionar:
- Preventivos: se pueden administrar las dosis de vacunas que le corresponden y así mantener a raya enfermedades infecciosas prevenibles. Además, se pueden realizar preguntas al médico sobre cuestiones nutricionales y cualquier otro tipo de dudas.
- Evaluar el crecimiento y desarrollo: se valora cuánto ha crecido en talla y peso desde la última visita y hablar sobre el desarrollo del niño. Se puede discutir sobre las cosas que puede realizar ahora, su comportamiento social y cuestiones relacionadas a su aprendizaje.
- Externar preocupaciones: se pueden realizar preguntas sobre cuestiones que preocupan sobre tu niño, bien sean relacionadas a su desarrollo, comportamiento, hábitos de sueño, alimentación y relación con otros miembros de la familia.
- Trabajo de equipo: las visitas regulares crean relaciones fuertes de confianza entre el pediatra, los padres y el niño. La Academia Americana de Pediatría recomienda el control de niño sano como una manera de atender a las necesidades del niño. Este enfoque de equipo ayuda a desarrollar de manera óptima la salud física, mental y social del niño.
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